Ya sé que no “debería” colgar esta foto con un cigarrillo, justo ahora que ha entrado en vigor la nueva ley anti-tabaco... pero, ¿qué nos queda a las y los fumadores, aparte del derecho a reírnos un poquito? ¿Me multarán por tener un blog humeante? Espero que no. Es sólo mi forma de decirle adiós a este hábito en sitios públicos, pero esa pequeña rebelde que llevo dentro me ha incitado a colgar esta fotografía.
Mi agradecimiento a la joven y prometedora fotógrafa española Laura Domínguez (http://www.lauslides.com/ ), que captó este momento cuando ya habíamos acabado una reciente sesión fotográfica. Cuando, tras una hora de posar, le dije “ya no puedo más, tengo que fumar un cigarrito”, y ella, tan simpática, me dijo “habérmelo dicho antes... la gente que fuma se relaja mucho más cuando tiene un cigarrillo entre los dedos”.
Es evidente que tendré que buscar otras formas para relajarme y sobre todo, tendré que volver a leer ese maravilloso libro de Cristina Peri Rossi, titulado Cuando fumar era un placer (Editorial Lumen, 2003). Libro que recomiendo a todo el mundo y del cual me tomo la libertad de copiar un poema...
Invitación
De lejos observo a una joven que fuma.
Vamos, muchacha, fúmate el mundo.
Trágate en volandas los deseos imposibles
exhala en volutas negras
el dolor, las decepciones.
Aspira fuertemente
aspira con los pulmones abiertos
aspira todo lo que hay:
el mal mezclado con el bien
como se mezclan las briznas de tabaco
el deseo y la desilusión
el amor y la falta de amor.
Aspira la vida en bocanadas
húndela en tus pulmones:
cuando te llegue el broncoespasmo
los médicos, quizá, ya sabrán cómo curarlo.
Cristina Peri Rossi
Les dejo con una canción de mi infancia, escrita por Víctor Jara, con una hermosa intepretación de una joven cantante chilena - Francesca Ancarola. ¡Hasta pronto!
Mi agradecimiento a la joven y prometedora fotógrafa española Laura Domínguez (http://www.lauslides.com/ ), que captó este momento cuando ya habíamos acabado una reciente sesión fotográfica. Cuando, tras una hora de posar, le dije “ya no puedo más, tengo que fumar un cigarrito”, y ella, tan simpática, me dijo “habérmelo dicho antes... la gente que fuma se relaja mucho más cuando tiene un cigarrillo entre los dedos”.
Es evidente que tendré que buscar otras formas para relajarme y sobre todo, tendré que volver a leer ese maravilloso libro de Cristina Peri Rossi, titulado Cuando fumar era un placer (Editorial Lumen, 2003). Libro que recomiendo a todo el mundo y del cual me tomo la libertad de copiar un poema...
Invitación
De lejos observo a una joven que fuma.
Vamos, muchacha, fúmate el mundo.
Trágate en volandas los deseos imposibles
exhala en volutas negras
el dolor, las decepciones.
Aspira fuertemente
aspira con los pulmones abiertos
aspira todo lo que hay:
el mal mezclado con el bien
como se mezclan las briznas de tabaco
el deseo y la desilusión
el amor y la falta de amor.
Aspira la vida en bocanadas
húndela en tus pulmones:
cuando te llegue el broncoespasmo
los médicos, quizá, ya sabrán cómo curarlo.
Cristina Peri Rossi
Les dejo con una canción de mi infancia, escrita por Víctor Jara, con una hermosa intepretación de una joven cantante chilena - Francesca Ancarola. ¡Hasta pronto!
Ay ay ay, te querí... No está mal algo frívolo entre tanto compromiso, y al fin y al cabo la provocación también es un placer.
ResponderEliminarElvira dixit
Estás muy guapa en la foto, Silvia, incluso fumando. Pero te aseguro que sin cigarrillo estás igualmente guapa, no necesitas ocultarte tras una barrera de humo… Besitos de una amiga ex-fumadora.
ResponderEliminarSilvia, me gustó tu foto y te suplico que no dejes de hacer lo que te gusta. Si eso es fumarte un cigarro y colgar la foto, hazlo. Al que no le guste, que pase sin ver. Me parece vergonzosa la intolerancia de los ex fumadores. Besos
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